Celia Rodríguez: “El acoso escolar es una realidad donde impera la ley del silencio”
2 mayo, 2016
RUBIO quiere recordar en el Día Internacional contra el Acoso Escolar que entre un 5 y un 10 % de los alumnos en España de 10 a 15 años sufre acoso escolar grave, una situación que se debería afrontar con un sistema educativo que promueva la igualdad y tolerancia en las aulas, según apuntan los especialistas. Estos datos, obtenidos del último informe realizado por la ONU en el año 2015, sitúan a nuestro país como el cuarto en Europa con una mayor incidencia en el acoso escolar, un ranking encabezado por Reino Unido, Rusia e Irlanda.
Se trata de una forma de maltrato, ya sea verbal, físico, psicológico y/o social, mantenido en el tiempo y que es ejercido por niños o adolescentes sobre otros con la intención de intimidar. A través de diferentes hechos como golpes, insultos, amenazas o aislamiento social, la víctima se enfrenta cada día a una realidad cruel de la que no sabe escapar, llegando incluso a avergonzarse y ocultar el acoso.
Esta forma de persecución en las aulas empieza poco a poco, con pequeños sucesos como bromas pesadas, comentarios de mal gusto o una burla aparentemente inocente. Pero estos actos se van extendiendo e incrementando en intensidad y frecuencia, hasta convertirse en una situación de maltrato y hostigamiento hacia las víctimas. “Es fundamental comprender esto y actuar frente al acoso escolar detectando sus primeras manifestaciones”, según afirma Celia Rodríguez, psicóloga, pedagoga y asesora de RUBIO.
“Este tipo de acoso, también denominado bullying, es una realidad en la que impera la ley del silencio. Tanto los acosadores, como las víctimas y los testigos ocultarán los actos de acoso”, afirma Rodríguez. Es por ello que puede parecer complicado detectarlo, sin embargo, no se trata de delimitar e identificar los hechos específicos y los protagonistas directos, sino de luchar contra la violencia y el maltrato.
Para abordar esta problemática, que en sus casos más extremos pueden llevar a la víctima al suicidio, RUBIO propone cuatro claves para detectar y prevenir el acoso escolar:
- Prestar atención a todo acto, por pequeño que sea, que suponga una falta de respeto hacia cualquier alumno o alumna. Estos sucesos deben reprobarse y no dejarlos pasar, pueden suponer el inicio del acoso. Las bromas de mal gusto o bromas tienen que condenarse, de no ser así se transmite a los alumnos que las faltas de respeto son aceptadas.
- Cualquier cambio puede ser una señal de alarma: faltas frecuentes a clase, descenso de las calificaciones, pérdida o deterioro de material escolar, aislamiento, etc. Estas situaciones deben ser especialmente vigiladas.
- Cuando existan sospechas, se debe observar y actuar con mucha prudencia hacia la víctima. Si se le pregunta directamente, puede negar la situación y cerrarse en banda.
- Fomentar una educación basada en la igualdad, el respeto a las diferencias y la no violencia, desde las familias, escuelas y sociedad. Y condenar los actos que vulneren la integridad de las personas para enseñar a los niños a no tolerar el acoso.
RUBIO nace hace 60 años de la mano de Ramón Rubio y es la editora de los afamados cuadernos didácticos basados en potenciar la plasticidad del cerebro, a través del desarrollo de las competencias básicas, como la escritura y el cálculo. Desde su fundación, RUBIO ha vendido más de 300 millones de ejemplares de cuadernos, que han acompañado a seis generaciones de españoles. La firma vuelca gran parte de sus esfuerzos en la Fundación Cuadernos RUBIO, una entidad sin ánimo de lucro de carácter educativo, cultural y solidario.
Entry Filed under: Sin categoría. .
Leave a comment
Some HTML allowed:
<a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <s> <strike> <strong>
Subscribe to the comments via RSS Feed